La piedra es un material que siempre ha sido valorado por su belleza y durabilidad. Ahora, gracias a la tendencia Stone Art y a los revestimientos digitalmente estampados, su presencia en el diseño de interiores se ha vuelto más prominente que nunca.
Los diseñadores están experimentando con diferentes tipos de piedra para crear ambientes únicos y cada vez más naturales. Por ejemplo, la roca caliza es ideal para aquellos que buscan un aspecto suave y discreto; su textura se presta para propiciar una sensación de serenidad y calma.
La piedra portuguesa, por otro lado, ofrece una imagen más teatral y audaz. Las rocas oxidadas garantizan un aspecto rústico y terroso que aporta un toque de calidez; mientras que el travertino es un auténtico Must Have. Su superficie ligera, junto a sus tonos neutros, lo hacen el apropiado para irradiar elegancia y refinamiento.